El proyecto aborda desafíos críticos en la Isla de Tierrabomba, incluyendo la vivienda inadecuada, la escasez de agua y las deficiencias en el saneamiento. Su enfoque principal es un modelo progresivo de vivienda orientado al turismo, diseñado para satisfacer las necesidades de los residentes mientras aprovecha los recursos de la isla.

Las viviendas son modulares y se construyen utilizando materiales y técnicas accesibles localmente, lo que garantiza practicidad y adaptabilidad con el tiempo. Diseñadas en etapas, responden a las necesidades cambiantes de sus habitantes y establecen distinciones claras entre los espacios públicos y privados. Cada unidad incorpora sanitarios secos, lo que reduce el consumo de agua y mejora la gestión de residuos orgánicos, contribuyendo a la sostenibilidad a largo plazo.

Como complemento a esta solución habitacional, el proyecto incluye estrategias urbanas como corredores peatonales verdes y bordes vegetativos basados en manglares para mejorar el entorno de la isla. Además, introduce el dispositivo “Aqua Palma”, inspirado en el proyecto “Warka Water”, para enfrentar la escasez de agua mediante la conversión de la humedad atmosférica en agua. En última instancia, la iniciativa proyecta una vida digna y sostenible para los habitantes de Tierrabomba, mejorando su calidad de vida y fortaleciendo la cohesión comunitaria.